Ad Banner
Ad Banner
Ad Banner
Ad Banner
 OTRAS NOTICIAS

LA ANEMIA AMENAZA LA SALUD Y EL FUTURO DE 259 MILLONES DE MUJERES EN EL SUR DE ASIA

11/07/2025 02:04 PM

NACIONES UNIDAS, 11 jul (NNN-UNIS) -- Las agencias de la ONU y el bloque socioeconómico regional SAARC lanzaron una alerta conjunta el miércoles, destacando a Asia Meridional como el epicentro mundial de la anemia entre adolescentes y mujeres.

Esta enfermedad afecta de forma desproporcionada a las mujeres y niñas más pobres de la región, y con 18 millones de nuevos casos previstos para 2030, expertos insisten en la necesidad urgente de una acción coordinada y efectiva.

Actualmente, se calcula que 259 millones de mujeres y niñas padecen anemia en la región, una condición que reduce la capacidad del organismo para transportar oxígeno y contribuye a la fatiga crónica, complicaciones maternas, y menores tasas de participación educativa y laboral.

“Se trata de un claro llamado a la acción”, afirmó Sanjay Wijesekera, director regional del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), quien presentó junto a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la SAARC un informe sobre la situación.

“Cuando la mitad de las adolescentes y mujeres de Asia meridional sufren anemia, no solo es un problema de salud: es una señal de que los sistemas les están fallando”.

La anemia no solo afecta a las mujeres, sino que también influye en el desarrollo infantil. Se estima que contribuye al 40 % de los nacimientos con bajo peso en el mundo, impactando negativamente en el crecimiento físico e intelectual de los niños, especialmente en los hogares más vulnerables.

El costo económico es elevado: se calcula que la anemia le cuesta a la región 32.500 millones de dólares al año, perpetuando ciclos de pobreza y mala salud.

Sin embargo, esta enfermedad es prevenible y tratable. Entre las soluciones comprobadas figuran la administración de suplementos de hierro y ácido fólico, dietas ricas en hierro y vitaminas, mejor saneamiento, control de infecciones y el fortalecimiento de los servicios de salud materna.

Los expertos recalcan que la colaboración multisectorial es clave para lograr avances sostenibles.

En casi todos los países de la región, el progreso depende del fortalecimiento de los sistemas sanitarios, la expansión de programas nutricionales y el acceso a servicios de salud para mujeres y adolescentes en comunidades marginadas.

Sri Lanka, donde el 18,5 % de las mujeres en edad reproductiva padece anemia, está ampliando su iniciativa nacional de nutrición enfocándose en los distritos más afectados.

En India y Pakistán también se registran señales prometedoras. En India, los estados más afectados están integrando suplementos de hierro en programas escolares y de atención prenatal. En Pakistán, se han puesto en marcha iniciativas comunitarias vinculadas a servicios reproductivos que permiten diagnósticos tempranos y seguimiento médico.

En Bangladesh, programas basados en escuelas están llegando a adolescentes con comidas nutritivas y educación en salud, coordinados por los ministerios de Salud, Educación y Agricultura.

Maldivas y Bután, aunque de menor población, priorizan la prevención desde edades tempranas mediante alimentación infantil adecuada, fortificación de alimentos y campañas de concientización pública. Ambos países invierten activamente en vigilancia epidemiológica y cooperación interministerial.

Nepal destaca por sus avances equitativos: desde 2016 ha reducido la prevalencia de anemia en mujeres en edad fértil en un 7 %, con descensos aún mayores en zonas rurales y empobrecidas. El trabajo de las voluntarias comunitarias ha sido fundamental para llegar a poblaciones remotas y conectarlas con servicios médicos.

Man Kumari Gurung, enfermera de salud pública en la provincia de Karnali, atribuye los logros a esfuerzos liderados por las comunidades.

“Las mujeres embarazadas reciben huevos, pollos y alimentos nutritivos a través de programas como Sutkeri Poshan Koseli (Regalo nutricional para nuevas madres) ”, explicó. “También hay subsidios en efectivo para cubrir gastos de transporte hacia hospitales, lo que apoya partos más seguros y una mejor nutrición”.

Acabar con la anemia requiere liderazgo político, inversión social y coordinación multisectorial. Los gobiernos deben liderar, pero también son clave las comunidades, los trabajadores de salud, las escuelas y las familias.

Unos sistemas sanitarios más fuertes, mejores datos y acciones integradas pueden ayudar a que las niñas y mujeres alcancen su pleno potencial, construyendo sociedades más sanas y economías más sólidas.

"Las jóvenes y madres son pilares fundamentales para el desarrollo de Asia Meridional. Garantizar su salud, alimentación y autonomía no es solo un deber moral, sino una inversión estratégica en el futuro de la región", declaró el doctor Golam Sarwar, secretario general de la SAARC.
-- NNN-UNIS

© 2025 BERNAMA   • Disclaimer   • Privacy Policy   • Security Policy